La importancia de jugar al Newcom

Es un deporte que reúne a personas mayores de 60 años pero que, a diferencia de otras actividades, se incentiva a la competencia.

Algunos de ustedes tal vez pensará que un grupo de personas de más de 60 años que se juntan en un parque a jugar a algo determinado sólo lo hace para pasar el tiempo. O para no quedarse en su casa. O para moverse un ratito. O para tantas otras cosas que se suelen minimizar.

En las líneas que siguen contaremos sobre un grupo de personas de más de 60 años que se juntan en plazas (en este caso, el Parque Centenario) con días y horarios establecidos para jugar, entrenar y competir al Newcom. Personas que no reniegan de estar en sus casas sino que eligen salir de ellas para divertirse. Que eligen moverse, que quieren ganar tiempo en vez de dejarlo pasar.

De lunes a viernes, desde las 18, el Newcom convoca a personas de ambos sexos y mayores de 60. “Un deporte que es como el hermano del vóley”, le explica a Comunidad PAMI Pedro Palmitelli, uno de los jugadores. Tiene 70 años, se lo conoce como Peter y esta actividad es la que más disfruta desde que se jubiló. Tienen cancha propia. Pintada y con redes. “Cuando empezamos, como no había red, usábamos un piolín”, recuerda Peter. La cancha está en el Pasaje Baldrich (nombre de la calle interna), al lado del Observatorio Astronómico. Ellos mismos le hacen el mantenimiento.

Palmitelli practicó deportes siempre. Fútbol, tenis, básquet y hasta patín. Es hincha de Lanús. “No me imagino sin venir a jugar. El Newcom me cambió la vida”, dice.

En el grupo, coinciden ante Comunidad PAMI, se respira la alegría del reciente campeonato logrado en competencia con equipos de la Ciudad de Buenos Aires y de la Provincia. Incluso tienen una página de Facebook en la que abundan fotos y agradecimientos. El entrenamiento es la base de ese logro.

Por las mañanas, también hay Newcom pero de manera recreativa. Y repiten los sábados, domingos y feriados. “Acá, las mujeres también tenemos nuestro espacio. El Newcom, en ese sentido, marca una evolución que acompaña a las evoluciones sociales”, explica Susana Pérez, de 73 años. Entrena a la mañana y compite a la tarde. También participa de los torneos. Incluso llegó a viajar: “Gracias al Newcom viajamos a competir a Chajarí, entre otros lugares. Fue una experiencia hermosa, porque trasciende lo deportivo. Es también lo social”.

Marta Peralta, gestora de este encuentro entre Comunidad PAMI y los jugadores, entrena cada mañana. A la tarde a veces se suma a jugar, pero siempre acompaña. También maneja la página de Facebook “Parque Centenario: Newcom y recreación” (https://www.facebook.com/CentenarioNewcomRecreacion), donde publica las novedades de sus compañeros. “Socializar es otro de los aspectos que destacamos quienes jugamos al Newcom. Acá hacemos amigos, compartimos hasta asados, nos contamos cosas, merendamos, nunca falta algo para comer y tomar después de cada entrenamiento”, explica. Le llaman tercer tiempo, como en el rugby. Pero a diferencia, agregan un “pretiempo” en el que charlan para ponerse al día.

“Acá hacemos deportes. Hay una tendencia a creer que cuando uno es grande sólo viene a pasar el tiempo. Pero no es así. Nosotros venimos a competir, a hacer deportes de verdad. A esto le sumamos todo lo social”, aclara Peter.

De a poco, coinciden, dejaron atrás los efectos de la pandemia. “Fue terrorífico lo del encierro”, suelta Susana Pérez. Encerrada, no sabía qué hacer. “Pero por suerte las actividades en los parques se abrieron antes que otras, así que pudimos volver a jugar”, destaca. “Buscamos hacer otras cosas, pero la ausencia del Newcom siempre se nos notó. Extrañamos mucho no jugar. Y sobre todo extrañamos no poder vernos”, aclara Marta.

Pero de todo, la muerte por Covid de Coco fue el golpe más letal. Coco tenía 86 años, integraba el plantel de jugadores y no faltaba nunca. “Lo recordamos venir en bicicleta a cada entrenamiento”, lamenta Josefa.

Para Susana, volver a jugar le levantó el ánimo, alicaído desde que se impuso el encierro por la cuarentena. “Yo tuve bajones. Y de hecho, a veces también los tengo ahora. Pero venir a jugar acá me levanta el ánimo. Cuando juego, me olvido de todo. Juego y listo. Todos los problemas quedan de lado”, dice. “Nos renueva”, acota. “Somos una comunidad”, resume Marta. “Es un lugar de contención”, suma Josefa.

Peter dejó unos minutos de jugar para charlar con Comunidad PAMI. Tanto a él como a sus compañeros se les notaban las ganas de cortar esta nota para seguir jugando y retomar luego. Así que Peter se disculpó y se fue a jugar. Volvió para el tercer tiempo. Marta, Susana y Josefina nos acompañaron todo el tiempo.

“Este es un deporte en el que no te sentís viejo, simplemente porque no nos tratan ni nos tratamos de viejos. Competimos. Y competir está buenísimo”, dice Peter.

En ese famoso tercer tiempo se suma Juan Ramón Fernández, de 80 años, que se define poeta. “Es nuestro referente cultural”, lo describe Marta. Juan Ramón no juega sino que va a ver cómo juegan sus compañeros. “Me gusta venir a verlos”, dice.

Entre quienes juegan, la mayoría son de CABA. Pero el grupo a veces se completa con amigos que viven en otros lados y vienen a Buenos Aires a hacer un trámite o visitar familiares. También hay compañeros de Perú, Venezuela y El Salvador.

La que acaban de leer es apenas una entre tantas historias de personas mayores de 60 años que salen de sus casas para jugar, para moverse, para divertirse. Y para competir. Para ganar tiempo en vez de para dejarlo pasar.

REGLAS GENERALES DEL NEWCOM

Se juega con dos equipos de seis jugadores cada uno. Hay mixto, femenino y masculino.

Tiene similitudes con el vóley. Con una red a una altura de 2.43 metros, los jugadores no rematan la pelota sino que tienen que agarrarla. La pelota no puede caer al suelo y no se puede tocar más de tres veces durante la jugada.

Cada partido es a tres sets, a 15 puntos cada uno.