«LA COCINA FUE UNA GRAN ALIADA DURANTE LA CUARENTENA»

Favorito de Masterchef, tuvo que dejar el programa, pero no la pasión por las hornallas. El actor Boy Olmi cuenta en esta charla con Comunidad PAMI cómo se las ingenió para hacer más llevaderos sus días de distanciamiento social.

 

Quienes a través de la tv siguieron el programa de cocina Masterchef, seguro alentaron por Boy Olmi. Es que el actor y director de 65 años no solo se ganó el afecto de los cocineros-conductores (lo cual parece una misión imposible), sino también de una interesante cantidad de espectadores. Pero más allá del show -que sabemos, a veces debe continuar- el artista aprovechó la propuesta para desarrollar sus aptitudes como cocinero de su casa, que comparte con su pareja, la actriz Carola Reyna. “En la cuarentena -le dice a Comunidad PAMI- cocinamos un montón”.

La cocina de su casa fue uno de los lugares en los que se refugió durante los meses de cuidados preventivos por el Covid 19. Pero hubo más, como dice en esta entrevista realizada a través de las nuevas tecnologías, herramienta fundamental para estos tiempos en los que se impone achicar distancias. 

¿De qué manera pasaste la cuarentena?

Siempre solos con mi esposa, Carola, guardados. Tenemos un lindo departamento que nos permite ir a un patio, regar las plantas y hacer gimnasia. Aunque la cuarentena tuvo etapas diferentes. Al principio uno pensaba que sería más corto. Después empecé a salir a caminar cerca de mi casa, por la Costanera Sur. También hice todas las tareas del hogar, que siempre las hice pero nunca con tanta responsabilidad. Aproveché para cocinar mucho, que me gusta: nunca hubo un delivery hasta pasados los seis o siete meses. 

Pero mis rutinas también fueron variando. Al gimnasio le sumé yoga, meditación. Muchos encuentros por Zoom. Tuve períodos de ciclos de trabajo diferentes. Hice entrevistas por Instagram. También teatro junto con Carola: hicimos un experimento teatral transmitiendo en vivo, solos, desde la cocina de casa. Fueron cuatro sábados. Hicimos cursos. Pero, te repito, mucho Zoom para vincularme con gente a la distancia. Después tuve que salir a trabajar por lo de Masterchef; por supuesto con todos los cuidados. Aunque eso ya pasó.

¿Y actualmente cómo sigue tu ritmo de vida?

Mis rutinas actuales son un poco más abiertas porque tengo la posibilidad de salir de casa, aunque siempre se mantienen todos los protocolos. Estoy alejado de la gente. Lo que valoro, y ahora más, es el contacto con la naturaleza, sacarme el barbijo y sentir la naturaleza.

¿Qué experiencia personal te dejó la cuarentena?

Que nos enfrentó con nosotros mismos. Todos quedamos como frente a un gran espejo, frente a una hoja en blanco que había que llenar. Y cada uno se encontró con las cosas resueltas o no resueltas que traía desde antes. En esa quietud todos nos enfrentamos con nosotros y empezamos a resolver cosas.

¿Cómo viste la actitud social en general respecto de los cuidados?

La actitud social tiene muchos extremos. Hay gente muy responsable y otra que no lo es. A veces me impresiona. Porque el cuidado no es solo para uno sino para con los demás. No todo el mundo lo tomó igual.

¿Hubo algún pasatiempo que te ayudó a sobrellevar el encierro?

Muchos. Juegos de mesa, rompecabezas. Jugué al Scrabble a distancia, con plataformas. Y la cocina, como te decía, fue una gran aliada. Me pareció muy positivo que la situación nos haya encontrado con la propia creatividad. Porque la creatividad es la salvación que tenemos los humanos para encontrar maneras. Y en oposición a eso está el miedo, el desconcierto. Creo que la situación a todos nos dejó heridas profundas.

¿A qué familiares o amigos no pudiste ver todavía y te gustaría ver?

Como todo el mundo, estuve muy alejado de la familia. De mi madre, de mi hijo. Después empecé a juntarme un poco más. Me pasó lo que creo que nos pasó a todos: empezar a exponernos con la gente que más queremos. De mis amigos, no he visto a casi nadie todavía.

¿Cómo imaginás el panorama del mundo artístico?

La actuación, las artes, está en transición. Aún no se resolvió nada acerca de cómo será nuestro trabajo en el futuro. Tenemos que encontrar la manera. Lo artístico no va a desaparecer porque tiene que ver con la esencia de lo humano. Pero habrá que reformularlo para que sea comercial. Eso es algo que aún no se resolvió.

Mientras, ¿qué proyectos laborales tenés?

Posiblemente trabaje en una serie con Ana Katz. Tengo propuestas para conducir un par de ciclos. Uno sobre historias que tienen que ver con la ciencia. Poco a poco se está volviendo a poner en marcha algo del aparato creativo. 

Reflexionando sobre la pandemia

Sobre todas las cosas tenemos que reencontrarnos con nuestra esencia, porque la pandemia fue un llamado de atención para la humanidad. Tenemos que empezar a enfrentar los problemas en común, que más allá de la pandemia son cosas muy graves. Como el cambio climático, la desigualdad social, la pobreza, el daño que generamos al medio ambiente, una forma egoísta que tenemos para con nuestra casa. Este parate creo que sirve para que reflexionemos acerca de cómo queremos seguir viviendo.