“El premio fue muy hermoso. Emotivo. Conmovedor. Porque fue cariñoso. No solo salió de un jurado sino de los compañeros, la mayoría del teatro. Inolvidable. No sé qué más decir”, cuenta Virginia Lago a Comunidad PAMI.

Es que no es para menos: por estos días recibió el Premio Estrella de Mar de Oro, un reconocimiento a sus años de trabajo y a la obra que en estos momentos lleva adelante: Gracias María Elena. 

Gran referente María Elena Walsh, ¿no?

La tengo todo el tiempo presente. La amo, la quiero, la amaré siempre. Es una mujer genial. Indispensable, de esas que nos acarician el alma y la cabeza. Nos hace reflexionar. De una ética extraordinaria. Una mujer siempre presente, en los buenos y en los malos momentos. Siempre ponía su voz, nos acompañaba con su genialidad. Y una de las escritoras más grandes del país, además de cada vez más reconocida. Tiene una obra literaria extraordinaria. Y una obra para chicos, con cuentos y canciones. Para mí fue maravilloso compartir este premio a partir de ella.

¿Cómo viviste este tiempo de cuarentena?

Muy bien, dentro de la tragedia mundial que vivimos. Apostando a la vida. Nunca tuve miedo. Jamás. Hice compras y visité a amigos y familiares con recaudos y siguiendo los protocolos. Leí mucho; como hace tiempo no leía. Preparamos el espectáculo de María Elena, con todo lo que eso significaba. Fue también un tiempo de creatividad. Siempre apostando a la vida. Creo firmemente que hay que disfrutar la vida y poner el pecho.

¿El trabajo salva?

Trabajo siempre, mucho. Me apasiona lo que hago. Transmitir lo que me gusta y mi pasión por el arte. Entonces por suerte tengo gente que me acompaña y seguirá estando. Tengo mis energías puestas en mi tarea y en la gente, en tratar de ser mejor, en estudiar. Ser curiosa. Compartir lo que pasa en el mundo. Me dediqué a mi programa de radio, El buen modo, en La 2 x 4, que lo tuve que hacer virtualmente, los jueves de 20 a 21.

¿Qué lecturas te acompañaron?

Ayer terminé El alma de las flores, de Viviana Rivero. Una novela extraordinaria. Releí La casa de los espíritus, de Isabel Allende. Leí mucha poesía. Y a García Márquez, a quien releo y leo. Releí Novios de antaño, que tengo una edición que me regaló María Elena. Me paso la vida leyendo poesía. Me gusta mucho. Es algo que todo el tiempo tengo conmigo. José Pedroni, Mario Benedetti, García Lorca..

¿Viste películas?

No. Vi algo de televisión, como Canal A. Me dediqué más que nada a lo que te contaba, que me gusta. No paro y no pararé. A veces creo que tengo 20 años. Vivo con pasión, enamorada de la vida. 

Con este espíritu, Virginia Lago participó de la campaña “No al viejismo”, que PAMI lanzó junto a la Defensoría del Público con el fin de reflexionar sobre los prejuicios y los estereotipos que circulan en torno a la vejez. 

En la primera etapa de la campaña participaron el historiador Pacho O’Donnell, la investigadora Dora Barrancos, la periodista y conductora Teté Coustarot, la modelo y empresaria Anamá Ferreira, el autor y director teatral Pepe Cibrián, el actor y humorista Rudy Chernicof, la cantautora Teresa Parodi y la actriz Virginia Lago, que en su spot hace referencia a la importancia del respeto a las personas mayores.